Hemos encontrado respuesta a tu pregunta a través del ayuntamiento de Barcelona.
"Si es el inquilino quien quiere realizar obras, es necesario el consentimiento por escrito del propietario, excepto si se trata de adaptar la vivienda a las necesidades de personas con disminución. Las pequeñas reparaciones debido al desgaste diario de la vivienda corresponden al arrendatario."